viernes, 14 de marzo de 2008

ENTERRANDO SUEÑOS


En el telar del amor,
que día a día tejemos,
vamos quitando colores
hasta dejarlo de negro.

El tiempo pasa, y nosotros
vamos pasando con él,
desandado torpemente
lo que anduvimos ayer.
Sin saber, como ni cuando,
ni cual fuera la razón.
Ni quién tuviera la culpa
se comienza entre los dos;
a, sin querer, convertir
en pesadilla los sueños.
En reproches y censuras
los idílicos momentos.
En críticas y desganas
las caricias y los besos.
La fuerza de la ilusión
en fuertes desasosiegos.

El fuego de las pupilas,
se vuelve cristal de hielo.
Y la calida palabra
en fría espada de acero
La confianza en dudas;
y las dudas en recelos.
Sin que se acierte explicar
tan insondable misterio:
Soñamos con ser felices;
pero en nuestra ofuscación;
diciendo ser los mas listos
y dueños de la razón,
jugamos a matar sueños;
y con ellos, el amor.
Sabiendo que sin soñar
se nos muere la ilusión.

Curioso es, que una vez,
Enterrado AMOR Y SUEÑOS,
nos sorprenda el no poder
decir como ayer; ¡Te quiero!

3 comentarios:

Conral dijo...

Hola, Antonia. Me da pena este poema, pero cuánta razón tienes, todo esto pasa de verdad y es triste. Ojalá a nosotras no nos pase.
Un abrazo.
Conchi.

Eduardo dijo...

Te felicito por este poema, tiene muy buen ritmo y estructura y sobre todo grandes verdades que las expresas muy bien en él.
Te mando un beso.

desde Lebrija para el mundo dijo...

Si, conral, es triste pero tan común.... Me alegró mucho el conecerte. Hemos estado en Madrid con nuestra hija y no he tenido apenas tiempo para la comunicación.
Abrazos

Gracias eduardo! Da alegria el llegar a gente joven porque... ¿eres joven verdad? besos